La FIA se ha puesto seria con el tema de las joyas. Con el tema de que los pilotos las lleven dentro de los coches de Fórmula 1 por, según dicen, motivos de seguridad con especial atención en los incendios. En ese sentido, a pesar de que está prohibido desde 2005, ha sido en este GP de Miami cuando han dicho 'no'.

Y cuando Lewis Hamilton, por dicho motivo,amenazó incluso con no correr en esta nueva carrera del Mundial y que tenían un piloto suplente preparado. Sebastian Vettel, a modo de protesta, paseó en calzoncillos por el 'paddock', y Romain Grosjean ha aparecido para mostrar su apoyo al inglés y a las joyas recordando su anillo de matrimonio.

De momento, el inglés de Mercedes tiene dos carreras de exención para cumplir con esta norma, pero en Mónaco deberá adaptarse a lo que diga la FIA a no ser que quiera empezar a tener que pagar dinero.

Un dinero que es, cuanto menos, cuantioso en cuanto haya una reiteración. Tanto en dinero como en puntos en el Mundial, algo que si se pelea por el título puede desnivelar la balanza para un lado o para otro.

En este respecto, son un total de 50.000 euros la primera vez que se infrinja esta norma. En caso reiterado, 250.000 euros. Y si se suma dicha falta por tercera vez, pérdida de puntos.

Kevin Magnussen, en este sentido, se quitó su anillo de boda para asegurarse el cumplir con las normas: "No quiero pagar los 250.000 euros de multa".

Pero matiza: "Acepto que me puedo quemar más el dedo si corro con mi anillo... pero si me pasase algo malo quiero llevarlo puesto. Me siento mal si me lo quito".

"Con algo como un anillo de boda asumimos la responsabilidad", sentencia.