El Real Madrid lleva 105 días sin ganar un partido como visitante en la Liga, desde el 14 de octubre, cuando derrotó en el Coliseum Alfonso Pérez al Getafe, y afronta el duelo contra el Valencia en Mestalla tras sumar sólo tres puntos en sus cuatro últimas salidas.

De un récord logrado en el Coliseum Alfonso Pérez -trece victorias consecutivas en Liga a domicilio, superando las 12 del Barcelona-, el Real Madrid ha pasado a unos pobres números lejos del estadio Santiago Bernabéu. En la clasificación de mejores equipos visitantes, es el sexto, con 15 puntos logrados de 24 posibles.

La buena línea a domicilio del equipo de Zinedine Zidane duró desde que venció en la pasada Liga el 26 de febrero de 2017 en Villarreal, hasta el 29 de octubre cuando visitó al Girona. Era la décima jornada del presente torneo liguero y el fin del récord llegaba con un sonoro batacazo ante un recién ascendido. En Montilivi cayó derrotado por 2-1 y desde entonces ha sido incapaz de volver a vencer fuera del Bernabéu en Liga.

En la duodécima jornada, llegó el primer derbi madrileño del Wanda Metopolitano que acabó con un empate sin goles frente al Atlético de Madrid. En la jornada 14 repitió resultado y ausencia de pegada en San Mamés. Otro 0-0 ante el Athletic Club que redujo aún más sus opciones ligueras.

Por la disputa del Mundial de Clubes, se aplazó su encuentro en Butarque ante el Leganés y su última salida la hizo a Vigo, donde empató con el Celta (2-2). En Mestalla, el Real Madrid buscará volver a saborear un triunfo a domicilio en la Liga, recuperar parte de la confianza perdida y mejorar su malas estadísticas como visitante, que, sumadas a su irregularidad en casa, han enterrado sus opciones de revalidar el título.