El ciclista polaco Michal Kwiatkowski (Team Sky) se ha impuesto a Peter Sagan (Bora-Hansgrohe) y a Julian Alaphilippe (Quick Step Floors) en un ajustado sprint final en la 108ª edición de la clásica Milán-San Remo, que se ha disputado entre las dos localidades italianas.

Kwiatkowski se alzó, de esta forma, con el primer 'monumento' de la campaña, y el segundo título en su palmarés de este 2017 tras haber ganado la última Strade Bianche. El polaco marcó un tiempo de 7 horas, 8 minutos y 39 segundos, el mismo tiempo que los dos ciclistas que entraron detrás de él y que completaron el podio de la 'classicissima'.

En segundo lugar quedó el flamante campeón del mundo, el eslovaco Peter Sagan, que a seis kilómetros del final estiró el pelotón y se marchó a por la victoria final, algo que supieron leer el finalmente vencedor de la prueba y el francés Alaphilippe, que tras una gran actuación en la París-Niza, volvió a mostrar fortaleza también en Italia.

Antes de este ataque final, se había producido otra escapada que fue neutralizada a 26 kilómetros del final, en las primeras rampas de la Cipressa. A partir de ese momento, fueron constantes las hostilidades de distintos ciclistas en la cabeza del pelotón, pero fue Sagan, un veterano en estas situaciones, el que asestó el golpe final y definitivo.

Tras estos tres, y a cinco segundos, llegó el resto del grupo, comandado por el noruego Alexander Kristoff (Katusha-Alpecin), y en el que estaban también nombres importantes como el de Arnaud Demare (FDJ), que finalizó sexto, o el de John Degenkolb (Trek Segafredo), séptimo.

La próxima cita con una de las monumento será el próximo 2 de abril en Bélgica, cuando se disputará el Tour de Flandes y, justo una semana después, el 9 de abril, será el turno de la cita francesa, la París-Roubaix. Volverá a Bélgica el circuito de estas clásicas de un día el 23 de abril, cuando se disputará la Lieja-Bastoña-Lieja.