Hace ya cuatro meses que el FC Barcelona anunció la destitución de Ronald Koeman como entrenador del primer equipo y el nombramiento de Xavi Hernández como su sucesor.

A pesar de que el conjunto azulgrana cayó al 'pozo' de la Europa League, fue eliminado de Copa del Rey y su brecha con el Real Madrid en Liga se ha ampliado, la plantilla parece haber sufrido una metamorfosis -ayudada por los fichajes y los jugadores recuperados de lesión- que ha derivado en un juego mucho más vistoso, mucho más del estilo de 'La Masía'.

En una entrevista al medio neerlandés 'Algemeen Dagblad', Koeman ha roto su silencio y ha explicado que su etapa en el Barça fue su "momento más difícil como entrenador".

"No me dieron el tiempo que le han dado al nuevo entrenador, Xavi. Todavía me resulta doloroso. Todo entrenador necesita tiempo y paciencia por parte de la directiva", señala Koeman, que apunta directamente contra el presidente.

"Laporta me había dicho mil veces que Xavi no sería su entrenador, porque le faltaba experiencia. Pero necesitaba un escudo, alguien detrás de quien esconderse", apunta.

"Yo no era el entrenador de Laporta. Esa sensación la tuve desde el primer momento, después de las elecciones no hubo clic. Faltaba ese apoyo necesario desde arriba", añade.

Llegó el momento en el que el neerlandés vio que no contaba con confianza alguna por parte de la directiva: "Lo importante no fue el dinero para mí. Tenía muchas ganas de triunfar como entrenador en el Barcelona, de hacer todo lo que pudiera, pero me di cuenta de que Laporta quería deshacerse de mí porque no estaba designado por él".

"No me verás en el Camp Nou por un tiempo, no puedo hacer eso todavía. Con este presidente no puedo fingir que no pasó nada", explica.

Sobre el Barça actual, Ronald destaca que se ha recuperado a jugadores clave: "Estaba trabajando con muchos lesionados. Ahora Pedri vuelve a estar en forma, y Ousmane Dembélé... Se puede ver todo".

Por último, sobre la salida de Leo Messi, ha reseñado su sorpresa ante el fichaje de Ferran Torres: "Fue ante la insistencia de la dirección del club que accedí a la salida de algunos jugadores para poner las finanzas en orden. Pero luego cuando ves que atraen a alguien por 55 millones de euros poco después de dejar ir a Lionel Messi...".

"Entonces te preguntas si no estaba pasando algo más. ¿Por qué se tuvo que ir Messi?", ha zanjado el técnico neerlandés, que se está tomando unos meses 'sabáticos' para estudiar en verano nuevas ofertas.