La segunda parte del encuentro entre el Deportivo y el Atlético Osasuna correspondiente a la decimosexta jornada de LaLiga ha empezado 18 minutos más tarde de lo fijado (19:30 horas) por un apagón que dejó el campo de Riazor a oscuras cuando el descanso estaba a punto de finalizar.

Los jugadores ya estaban en el túnel de vestuarios, preparados para afrontar el segundo periodo, al que se llegó con 2-0, cuando el estadio sufrió un repentino corte de luz efímero pero suficiente para que los focos del campo se apagaran.

"La caída de la iluminación ha sido provocada por un corte en el servicio público general que ha afectado al equipo de suministro principal del estadio y ha impedido arrancar a los equipos de reserva", ha explicado el club coruñés.

El suministro de energía se recuperó de inmediato, la publicidad estática y la megafonía funcionaron y en la grada, a la espera de que los focos volvieran a iluminar el césped con normalidad, los flashes de los móviles brindaron un espectáculo más propio de la Navidad que de un partido de fútbol.

Los jugadores tuvieron que calentar unos minutos y el partido se reanudó a las 19:48 horas, 18 minutos después de lo previsto.