Bobby Portis sigue dejando sus buenas señas de identidad en la NBA. El jugador de New York Knicks, que en su día protagonizó un buen altercado con Nikola Mirotic, ha cometido una de las faltas más bestias de la temporada al soltar un tremendo manotazo contra Caldwell-Pope.

Tal fue la acción que no solo le costó irse directo a vestuarios sino que el jugador de los Lakers perdió hasta la cinta.

Caldwell-Pope entraba a canasta para encestar cuando, de repente, sintió algo en su cabeza. Era el brazo de Portis, que por unos segundos se pasó al boxeo para un buen golpe en la cara de su rival.

La acción provocó que LeBron James estallara ante el de los neoyorquinos, que finalmente se fue expulsado.

Portis ya mandó en su día al hospital a Nikola Mirotic en un entrenamiento de los Chicago Bulls. Sin nadie a quien zurrar, el jugador eligió a Satoransky para descargar 'tensión'. Directo a la calle se fue tras otra bestial agresión al jugador de los Wizards.