Mayte y María eran bailarinas, hasta que un día decidieron cantar. Empezaron en Zaragoza, donde las echaron de una sala por ser demasiado elegantes. "Así que nos quedamos en la calle con un croissant", explica Mayte Mateos.

De ahí, a un hotel repleto de alemanes en Fuerteventura en el que tuvieron suerte, ya que un grupo de ellos venía de la discográfica R.C.A. "Pero como estaban borrachos todos los días, no sabíamos si se iban a acordar de nosotras", detalla Mayte.

Sí lo hicieron, y se fueron a Hamburgo, donde se creó 'Baccara' y el hit 'Yes sir I can boogie'. Solo había una cosa que iba mal: España. Además, cantar en inglés no ayudaba. "Pero es que el 'Yes sir I can boogie' en español es horrible", destaca María Mendiola.

Llegaron hasta Eurovisión representando a Luxemburgo. No ganaron, pero la canción fue la más vendida del certamen. Cinco años de gloria que se terminaron súbitamente.

"El grupo se disolvió porque mi compañera quería cantar en solitario", recuerda María mientras que Mayte señala que "María quería cantar el 50%, no estaba de acuerdo con cantar poco y lo dijo por la vía más drástica, el juzgado".

Desde entonces, hay dos Baccaras, cada una con una compañera que sustituye a la otra, pero juntas de nuevo, nunca más.