Un reciente estudio, publicado en 'Science Advances', explica que la producción de plástico por parte del hombre hasta el año 2015 asciende a 8.300 millones de toneladas de este material a nivel mundial. Asimismo, los científicos han previsto que para el año 2050, 12.000 millones de toneladas de residuos plásticos estén acumulados en vertederos o en la naturaleza.
Por este motivo, Kevin Kumala ha encontrado la manera de solventar un problema que amenaza al medio ambiente remplazando este elemento por unas bolsas biodegradables hechas con resinas de yuca.
Además de cumplir con la misma función que las bolsas cotidianas de plástico, cuando llegan a los océanos se degradan y se disuelven en el agua y no dejan ningún residuo tóxico y dañino para el ecosistema y las especies marinas.
Estas bolsas son el producto estrella de Avani Eco, la empresa encargada de confeccionarlas. La institución crea muchos más productos biodegradables con materiales como la caña de azúcar y la maicena. Esta idea ha sido considerada como una de las más innovadoras de indonesia y ha recibido el premio 'Most Valued Business Indonesia', que premia a las iniciativas más responsables con el medio ambiente del país.
Hasta amenazas de muerte
El precio de divulgar ciencia: amenazas, insultos y acoso, un problema que afecta especialmente a las mujeres
Un arma de doble filo Aunque muchos científicos logran acercar el conocimiento al público, cerca del 50% enfrentan insultos, amenazas e intimidaciones. Esta problemática afecta aún más a las mujeres, quienes constituyen el 57% de las principales víctimas de acoso en este ámbito.