La filtración de Wikileaks afirmaba que un tercio de la población comenzará a tener problemas de escasez de agua a partir de 2025, mientras que la situación se volverá catastrófica en 2050.

El tipo de dieta predominante en los países de Occidente, principalmente carnívora, podría ser una de las causas principales para desembocar en esta situación: alimentar al ganado conlleva un elevado gasto de agua puesto que los cultivos que consumen requieren una enorme cantidad de recursos hídricos.

Si nuestra dieta fuera más vegetariana, la esperanza de vida del agua potable sería mayor. Se desperdiciaría menos agua si el ser humano fuera principal consumidor de esos vegetales que mayoritariamente se dedican a alimentar el ganado, como el maíz, la soja u otros cereales.

En la actualidad, EEUU es el país con mayor consumo de carne a nivel mundial, pero preocupa que en otros territorios con menor tradición carnívora, como China o India, crezcan este indicador relativo al tipo de alimentación y consumo.