Smart ForFour ED, a fondo: un ciudadano ejemplar, ágil, limpio y silencioso

Donde caben dos… no caben cuatro. Eso debió pensar Smart cuando decidió crear un nuevo modelo con cuatro plazas frente al mítico Smart ForTwo. La marca especializada en suburbanos ha creado este vehículo de propulsión eléctrica con potencia inmediata gracias a su carrocería ligera. Hemos tenido la oportunidad de conducirlo en el tráfico urbano diario, pero también en recorridos interurbanos.

Como propulsión trasera y con un peso contenido, el Smart ForFour ED se ha mostrado enormemente ágil y maniobrable, manteniendo fácilmente bajo control toda la tracción del instantáneo poderío del propulsor eléctrico. Para ayudar en ese cometido, el pequeño alemán monta en el tren trasero ruedas de mayor tamaño, y cuenta con un ESP bien configurado. Mecánicamente, el FourFour ED dispone de un motor eléctrico síncrono de 60 kW (81 CV y un conjunto de baterías de litio situadas bajo el piso del coche con un total de 17,6 kWh.

El ForFour ED es un prodigio en comportamiento. Sin el toque pasional de la gasolina, pero muy juguetón en la 'selva' asfáltica. El empuje de parado es mucho mejor que en la generación anterior de los ED y la entrega de potencia es más alegre, y consistente en un espectro más grande de uso. Sales de los semáforos el primero. También garantiza un total manejo por la ciudad la dirección. Smart ha prestado especial atención al radio de giro. En tan solo 6,95 metros es capaz de dar una vuelta de 360º, así que te puedes imaginar la practicidad y la facilidad de movimientos que esto otorga. Si a esto le sumamos las medidas cortas, y que apenas hay ángulos muertos, el control sobre el tráfico es excelente.

Dinámicamente, es un auténtico 'ratón': sumamente ágil, con cambios de ritmo vertiginosos. En carreteras estrechas va fino y suave y es que los Smart ED son los eléctricos más divertidos, confirmado.

Seguridad y tecnología

El Forfour, al igual que el Fortwo, dispone de un radar que mide en todo momento la distancia con el coche que nos precede. En función de la medida él solo calcula la cantidad de retención que debe aplicar al motor eléctrico una vez levantamos el pie del acelerador. Si pulsamos el botón ECO, el programa actúa de una forma menos precisa porque la retención se incrementa. Aun así es un buen programa que siempre actúa para mejorar la autonomía del coche.

Batería y tiempos de recarga

Mejorado el motor y la bateria, los tiempos de recarga varían, lógicamente, en función del enchufe al que conectemos el coche. Para hacernos una idea, en una toma normal y corriente se tardarían seis horas en recargar el 80% de la batería. De hacerlo así nunca se llegaría a llenar por completo, ya que para conseguir el 100% de la carga deberemos usar un Smart Box. Si decidimos instalar uno la recarga al 80% demora tres horas y media, más o menos. A todo esto, los preparadores han creado una aplicación con la que podremos programar las recargas además de poder visualizar en todo momento el estado del coche. Lo dicho, mucha tecnología en tan poco espacio.

En fin, que el mundo ha cambiado, los datos de ventas de eléctricos e híbridos lo avalan y Smart se está preparando para ello. De hecho lleva haciéndolo desde 2007. La gama Electric Drive es la más 'inteligente' de todas las unidades. En cuanto a su comportamiento, da igual que cojas uno u otro, pues en todos los casos el comportamiento, la suavidad y la conducción son iguales. Sobresalientes.

Por poco dinero más de lo que cuesta el Smart ForTwo, y por 80 centímetros extra, tienes cuatro plazas que otorgan una mayor versatilidad. Puede que el Fortwo sea el que mejor representa el concepto urbano Smart, pero el ForFour suma la practicidad y la capacidad de llevar a tus amigos y familiares. Elegir uno u otro puede ser una mera cuestión de ocupación. Dejando esto a un lado, si se busca un coche pequeño, ahorrador, bien equipado y eléctrico, o se piensa en esta posibilidad, no hace falta que mires mucho, la familia Smart ED está ahí para ti.

El FourFour ED con sus baterías tiene una autonomía, conforme al ciclo europeo de consumo, de 160 km, un 10 por ciento más de alcance que las que llevaba el ForTwo ED; mientras que la velocidad máxima está autolimitada a 130 km/h. Los más de 14 kWh útiles de sus baterías pueden cargarse en un enchufe de 16 Ah, a razón de 3,68 kWh, en unas 4 horas y con 10 Ah en un enchufe doméstico, en 6 horas y media. Lleno da para cerca de unos 100 km combinando vías rápidas, carreteras de circunvalación y ciudad, es decir, que el coste de esos kilómetros equivale a 3,75 euros, poco comparado con el de un coche equivalente con motor térmico; pero la autonomía es un punto corta e inestable. podrán aumentar hasta los 120 km aproximadamente si somos más cuidadosos con el acelerador y utilizamos el modo ECO.

Como funcionalidad para aumentar el espacio o la versatilidad de carga, se puede abatir los dos respaldos traseros enrasan con el suelo del espacio de carga o que tiene un hueco útil para bastones o paraguas bajo la banqueta trasera. La batería tiene una garantía que asegura que su rendimiento no descenderá del 80 por ciento en los primeros 8 años o 100.000 km. El equipamiento es muy completo, e incluye, entre otros elementos, sensores de luz y lluvia o asistente de frenada de emergencia, muy útil en terreno urbano. Ambas carrocerías destacan por su agilidad en terreno urbano, donde, especialmente el Fortwo, se desenvuelve con una insultante suficiencia, saliendo el primero de los semáforos si es necesario.

El diseño de los nuevos smart, que se mantiene prácticamente invariable en estas versiones eléctricas. Las mayores diferencias las encontramos en la parrilla delantera, con un diseño específico para esta versión, y en la parte trasera, donde la ausencia de tubo de escape delata a esta versión. En el interior no hay cambios a excepción de una nueva instrumentación, que sustituye elementos como el cuentarrevoluciones por indicadores de autonomía o consumo instantáneo.

Destaca de forma muy positiva el sistema de retención y recarga, que al soltar el acelerador aprovecha la energía cinética para convertirla en energía eléctrica. Este modelo estrena un sistema controlado por un radar, que dependiendo de factores como la distancia con el vehículo precedente o la velocidad, aplica de forma automática 5 niveles diferentes de retención.

Mediante la aplicación ‘smart control’, accesible desde ordenadores personales, tablets y smartphones, podremos prefijar el rango horario en el que deseamos cargar la batería (sacando partido de la tarifa de electricidad contratada) y programar nuestro momento de salida para encontrarnos un habitáculo climatizado a nuestro gusto, aprovechando la energía obtenida de la red.

El ForFour ED conserva muchas virtudes del biplaza.Es casi igual de maniobrable por el centro de la urbe, gracias a su escasa longitud (3,50 m) y a su todavía corto diámetro de giro (8,65 m), mientras que la superior batalla (2,49 m) se encarga de mejorar la estabilidad en carretera, ya sea recta o plagada de curvas.

A cambio de perder una fracción de manejabilidad frente al ForTwo, se disfruta de su mayor ventaja: la de poder transportar cuatro personas. No es que sobre espacio en las plazas traseras, pero mejor eso que nada. Curiosamente, frente a los 260 litros del ForTwo, pierde 75 litros y queda en unos discretos 185 a causa de que el motor se aloja sobre el eje trasero y bajo una bandeja de carga de escasa profundidad. Siempre podemos abatir los asientos para disponer de hasta 975 litros.

El ForFour acelera de 0 a 100 km/h en 12,7 segundos, lo que se traduce en 1,2 s más que el fortwo. No son cifras que intimiden a nadie, lo sé; pero en la práctica se disfruta mucho su capacidad de aceleración de 0 a 80 km/h, rango en el que normalmente nos desplazaremos por la ciudad. Los smart eléctricos están pensados para adecuarse a el entorno urbano; y en él, se mueven como peces en el agua. La agilidad del smart eléctrico a velocidades bajas y medias le hace 'rey de los semáforos' con permiso de las motos.

Circulando por carreteras secundarias, el ForFour no desmerece salvo porque el propulsor va perdiendo vida progresivamente a partir de los 80 km/h, mientras que la autonomía -ya justa- desaparece alarmantemente. Esto limita el radio de acción de un automóvil de gran potencial. Como usuarios particulares, debemos tener muy claro que probablemente sólo nos servirá como segundo coche; un muy buen segundo coche siempre que lo usemos para lo que sirve.

Y hasta que los Smart eléctricos, hoy ED pasen a denominarse EQ, la nueva submarca del Grupo Daimler que se encargará de los vehículos propulsados por baterías, Smart ofrece para este coche una interesante oferta: 200€ al mes en 36 cuotas, y el paquete Carga&Istala por 600€ (coste 1.600€). Con una entrada de 8.301,61€ y una cuota final de 11.682,94€ (Tin: 7,75% y Tae: 9,39€. Más info en: SMART