Se estima que hasta 1 millón de personas en España sufrenmigraña crónica y más de 4 millones migraña episódica, afectando en el 80% de los casos a las mujeres. A nivel mundial, la migraña es la tercera enfermedad más prevalente del mundo y el trastorno neurológico más discapacitante entre los 16-50 años. Sin embargo, los datos evidencian que el 95% de los pacientes que tiene este dolor de cabeza tarda de media más de seis años en recibir un diagnóstico y el 40% está sin diagnosticar.

"La migraña no es sólo un dolor de cabeza, los pacientes sufren síntomas altamente incapacitantesque pueden llegar a limitar su funcionalidad y afectar gravemente su calidad de vida, influyendo negativamente en diferentes ámbitos a nivel personal, laboral, así como en sus estudios, ya que en la mayoría de casos, comienza en edades jóvenes", tal como han explicado diferentes profesionales en la jornada 'Derribando los muros de la migraña', organizado por la compañía Lundbeck.

Y es que "la banalización social es una de las principales trabas que se encuentran los pacientes: “Estamos frente a una enfermedad neurológica discapacitante, pero cuando le dices a alguien que tienes migraña lo equipara a un simple dolor de cabeza", ha asegurado Isabel Colomina, presidenta de la Asociación Española de Migraña y Cefalea (AEMICE).

Por ello, según apunta Colomina, es clave "proporcionar información sobre la migraña para mejorar el diagnóstico y el tratamiento, al tiempo que destaca la necesidad de concienciar a la sociedad sobre lo que supone sufrir esta enfermedad. La migraña es la primera causa de discapacidad en el adulto menor de 50 años, sin embargo, los pacientes tienen un problema grave para que se les reconozca dicha discapacidad por parte de los organismos responsables.

"Una mayor frecuencia de cefaleas aumenta el riesgo de múltiples comorbilidades como trastornos psicológicos y del sueño, incluyendo depresión, ansiedad e insomnio, enfermedades cardiovasculares trastornos gastrointestinales y trastornos relacionados con procesos inflamatorios (como el asma)", apuntan los expertos.

¿Por qué se tarda tanto en diagnosticar la migraña?

Según datos recientes, los pacientes tardan más de 6 años en ser diagnosticados y, además, el 50% considera que la información recibida en el momento del diagnóstico es insuficiente, por lo que no consideran útiles las visitas a las consultas médicas", señala el Dr. Pablo Irimia, coordinador del Grupo de Estudio de Cefaleas de la Sociedad Española de Neurología (SEN) y consultor del Departamento de Neurología de la Clínica Universidad de Navarra.

La presidenta de AEMICE también incide en el problema que supone para el paciente el retraso del diagnóstico, ya que conlleva que el tratamiento correcto se comience más tarde y la enfermedad se demore más en controlar. Asimismo, la ruta asistencial del paciente debe mejorarse en varios aspectos como la formación médica en el diagnóstico y el tratamiento de la migraña, así como la comunicación entre atención primaria y especializada. "Los casos más complejos deberían ser atendidos en una unidad especializada o unidad de cefaleas, que todavía son insuficientes", añade.

No obstante, es importante destacar las investigaciones realizadas en los últimos años, que han permitido identificar algunos de los factores claves en el desarrollo de la migraña como el neuropéptido CGRP, que desempeña un papel crucial en la patogénesis de la enfermedad, ya que los niveles séricos de CGRP están elevados cuando se produce una crisis.

"Las nuevas vías terapéuticas van dirigidas hacia el bloqueo del péptido relacionado con el CGRP con anticuerpos monoclonales. Son tratamientos específicos, muy bien tolerados y más eficaces que los tratamientos tradicionales de la migraña", señala el Dr. José Miguel Láinez, presidente de la Sociedad Española de Neurología (SEN) y jefe de Servicio de Neurología del Hospital Clínico Universitario de Valencia.

Durante estos últimos años, han aparecido tratamientos como eptinezumab que han mejorado la calidad de vida de los pacientes. "Este fármaco permite que el paciente perciba desde el primer día unos beneficios inmediatos que se sienten desde la administración de la primera dosis del tratamiento", explica el doctor Láinez.

"Esta acción rápida es esencial para un efecto preventivo en el caso de que se necesite, ya que los tratamientos preventivos son cruciales en un 50% de los casos para reducir la frecuencia de las crisis, mejorar la calidad de vida del paciente y fundamental para el tratamiento de la migraña crónica", concluye.