Con cebolla o sin cebolla, la tortilla de patatas será siempre un must de la gastronomía en España. Y cada uno y una tendremos nuestro bar o bares favoritos porque es allí donde ponen 'la mejor tortilla de patatas del mundo'. Podemos también hacerla casera y escoger una receta que sea 100% saludable.

Porque sí es posible hacer la tortilla de patatas saludable -o más saludable- y que así, engorde menos. Porque es importante recordar que ningún alimento o plato engorda o adelgaza por sí solo sino que siempre -siempre- debemos tener en cuenta elconjunto total de toda nuestradietay alimentación.

Por ello y en este contexto, debemos decir que sí podemos hacer un plato más o menos calórico y que además sea más o menos nutritivo. Como siempre, los ingredientes importan así como la forma de preparar el plato, es decir, las formas de cocinado que se utilicen en su elaboración.

"Y tres serían las claves para hacer una tortilla de patatas tradicional saludable", afirma a laSexta.com la Dra. en Alimentación y Nutrición, Laura Isabel Arranz (@lauragananutricion), profesora asociada a la Universidad de Barcelona con motivo delDía Mundial de la tortilla de patatas. Sí, nuestra tortilla también tiene su día.

  • La forma de freír las patatas
  • La cantidad y el tipo de sal que se use
  • La cantidad de huevos enteros o de claras que se se utilicen

La forma de freír las patatas en nuestra tortilla

Es una de las claves más importantes para que la tortilla sea saludable realmente. Así y según explica Arranz, "debemos freír las patatas y la cebolla en muy poco aceite, mejor tapadas con una tapadera, y usando siempre una grasa de calidad como es el aceite de oliva virgen extra".

Haciéndolo de este modo, es decir, si freímos las patatas en poco aceite y tapadas, "en realidad no sería una fritura en sí, sino una cocción con algo de aceite para que queden más sabrosas", apunta la experta.

Después con la tortilla ya hecha, añade, "podemos hacer exactamente igual: hacerla en una sartén con el mínimo de aceite, siempre aceite de oliva virgen extra, y tapada para que se vaya haciendo poco a poco".

La cantidad y sal que se use en la tortilla

La segunda clave es centrarnos en la cantidad y en la sal que usemos. Recordemos que según las recomendaciones de ingesta de sal de la Organización Mundial de la Salud (OMS), no se deben superar los 5 gramos de sal (o de 2,5 g de sodio) al día.

Cuanta menos sal, usemos mejor; teniendo en cuenta no sólo la sal de mesa sino sobre todo la sal de los productos ultraprocesados, es decir, la llamada sal invisible que supone casi el 70% de toda la sal que ingerimos.

Por ello, y para que la tortilla de patatas sea saludable "sería importante echar poca sal y siempre que sea posible utilizar marina natural sin aditivos o sal rosa del Himalaya, pues aunque tienen igualmente mucho sodio, no tienen tanto como la sal común de mesa y tienen también algo de otros minerales como son el yodo y el magnesio respectivamente", aconseja la experta.

La cantidad de huevos enteros o claras que se utilice

La tercera clave para ya hacer una tortilla ideal de sana "sería sustituir alguno de los huevos por clara de huevo, así la tortilla tendrá menos colesterol y más proteínas", sostiene esta experta en alimentación. Por ejemplo, "si hacemos una tortilla de unos 6 huevos, podemos usar 4 huevos y 3-4 claras".

También debemos recordar que el huevo es sin duda la proteína por excelencia porque contiene todos los aminoácidos de las proteínas y que de forma natural y en condiciones sanas, podemos tomar un huevo al día o incluso dos.

Y como apunta en este artículo el Dr. Leopoldo Pérez, de la Fundación Española del Corazón (FEC), "si tenemos el colesterol alto, podemos tomar 2-3 huevos a la semana, ya que es una fuente de proteína de alto valor biológico y podemos incluirla perfectamente en nuestra dieta. Es un mito el que no se puedan tomar huevos".

Versiones saludables de la tortilla de patatas de toda la vida

Alejándonos un poco más de la tortilla clásica de toda la vida, ésta puede tener muchas versiones saludables. Como, por ejemplo, sustituir parte de las patatas por verduras como el calabacín, la calabaza, los pimientos o la berenjena.

"Así, explica Arranz, tendremos tortillas deliciosas pero un poco más ligeras, con menos hidratos de carbono y más vitaminas y minerales que aportarán todos esos vegetales", explica Arranz. También, podemos innovar con las especias y reducir la sal. "Por ejemplo, podemos utilizar especias como cúrcuma y curry, o incluso darle un toque mediterráneo echándole orégano".

Porque no olvidemos que "una tortilla de patata y otros vegetales será un plato exquisito y nutricionalmente completo con hidratos de carbono, proteínas, vitaminas, minerales, antioxidantes, fibras... y las grasas saludables que nos aporta el aceite de oliva virgen extra. Además, es muy fácil de digerir. Por lo que podemos decir que sin duda, es una buena opción para todos", finaliza la experta.