Cinco playas de la Costa Brava que merece la pena visitar

Illa Roja, Begur

Esta cala nudista es conocida más allá de nuestras fronteras, y es una de las más amplias de la zona. Su rasgo más característico y peculiar es la formación rocosa rojiza, con forma de islote, que la preside. De dicho islote proviene su nombre, Illa Roja. Es una playa muy tranquila, con apenas aglomeraciones y de arena fina. Para acceder a ella, hay que hacerlo a través del camino de Ronda, y su acceso está apartado de cualquier aparcamiento.

Cala jugadora, Cabo de Creus

En el término municipal Cadaqués y en pleno Parque Natural del Cap de Creus, se encuentra el cap o cabo de Creus, donde podemos encontrar maravillosas calas vírgenes. Nos encontraremos en el punto más oriental de la Península Ibérica y en una cala en la que predomina la calma y el entorno natural tan poderoso nos hará abstraernos por completo. En esta playa hay numerosas formaciones rocosas y no es de arena, sino de piedras, pero eso no supondrá un impedimento para nuestro disfrute.

Cala Aigua Xelida, en Tamariu

A tan solo kilómetro y medio de la playa de Tamariu está la cala d’Aigua Xelida donde la vegetación y las rocas llegan hasta la orilla. El acceso hay que hacerlo a pie y por un tramo de escaleras que sale desde la calle de l’avi Xicu. Su entorno natural y su arena fina nos proveerán de todo lo necesario para un día perfecto de playa. Además, la ocupación es bastante baja, así que no tendremos problemas en mantener la distancia de seguridad.

Sa Caleta, Lloret de Mar

Al norte de Lloret de Mar se ubica esta playita, con casitas blancas al fondo y el Castillo d’en Plaja presidiendo la playa y mirando al mar. Uno de los grandes atractivos de esta playa es su fondo marino, pues es muy rico en especies de flora submarina. El acceso es bastante sencillo pues solo hay que seguir el paseo marítimo de Lloret de Mar, pero al estar un poco más apartada del pueblo, no hay tanta gente.

Cala Sa Sabolla, Cadaqués

Al sureste de la bahía de Cadaqués, continuando el camino de las casas d’es Quers en dirección al Faro de Cala Nans, encontraremos la cala Sa Sabolla. A lo largo de este camino podremos deleitarnos observando las imponentes paredes de piedra seca, barraquitas de piedra, y una gran variedad de plantas autóctonas. Por supuesto, no debemos olvidarnos de las magníficas vistas que tendremos hasta que lleguemos a la cala.