Como ha explicado el veterinario Víctor Algra, mucha gente tiene la creencia de que las embarazadas no pueden convivir con gatos. Esto es totalmente falso. Como ha contado, el responsable de este mito es un parásito que causa la toxoplasmosis, una enfermedad que se puede contraer, entre otras maneras, al entrar en contacto con las heces de los gatos.

El veterinario ha explicado que cuando se conoce el ciclo del parásito es posible ver por qué tener gato no supone ningún riesgo. Como ha contado, para que un gato se infecte de este parásito es necesario que coma carne infectada: por ejemplo algún animal infectado que haya cazado o carne cruda infectada. Después de ingerir esa carne infectada, pasan entre 5 y 8 días y, entonces, empieza a liberar los huevos del parásito a través de sus heces durante, aproximadamente, 20 días. Pasado ese tiempo para ya que su sistema inmune habrá combatido el parásito y lo habrá eliminado. Es importante, como ha explicado Víctor, que los gatos que viven dentro de las casas están menos expuestos y por ello hay menor riesgo de que se contagien.

Algra, además, ha dado una serie de consejos para todas aquellas embarazadas que tengan gato. Como ha explicado, pueden limpiar los areneros con guantes y, además, ha recomendado limpiar la bandeja de arena diariamente. Los huevos del parásito causante de la enfermedad tardan entre uno y cinco días en poder infectar. Por eso, si se limpian los areneros diariamente se reduce el riesgo de contagio. Además, también ha recomendado no dar carne cruda a los gatos y si es un animal que caza valorar cómo poder gestionarlo.