Verónica Sanz pregunta a Javier Díaz-Giménez si, "en función de dónde y cómo naces, ¿tienes unas oportunidades u otras?". "Claro que sí", responde él, "vivimos en un país desigual, por lo que la vida es desigual". "Dónde te deja la cigüeña y qué genes tienes determina muchas de las cosas que vas a hacer", dice, y a esto se suma las decisiones que cada uno toma a lo largo de la vida, con las que "poco a poco se construye la vida".

El profesor también defiende que los jóvenes que "nacen hoy tienen la mejor educación, sanidad, ocio y vacaciones de la historia". Por lo que, en su opinión, "están mucho mejor de lo que estaban sus padres y abuelos", ya que "tenemos un estado del bienestar espectacular".

Con esto Javier Díaz-Giménez desmiente que vayan a ser la primera generación que vivan peor que sus padres. "Van a vivir diez años más que sus padres", asegura, y dice que "es un negocio protestar y quejarse". "Eso es rentable", defiende; y añade que "somos tan ricos que podemos permitirnos una tribu de llorones que se dedican profesionalmente a llorar".