Ante los 20 años del 'tamayazo' en la Comunidad de Madrid, laSexta Columna analizó lo ocurrido, cuya investigación se bloqueó. "No había pruebas, pero tampoco se buscaron. No hubo voluntad de investigar aquello", apunta Alfonso Pérez Medina, responsable de Tribunales de laSexta.

El entonces fiscal anticorrupción, Carlos Jiménez Villarejo, sí tuvo voluntad de investigar en 2003: "Me pregunto por qué hay tanta preocupación por que la Fiscalía investigue esto. Es una pregunta que hago a quien la pueda responder, yo no la puedo responder".

Llegó a denunciar que el Fiscal General del Estado, nombrado por el Gobierno, le obligó a dejar sus averiguaciones. "Me comunicó que suspendiera la práctica de diligencias hasta que se suspendiera la práctica judicial del Tribunal Superior de Justicia de Madrid", añadía el fiscal.

"Aquello fue impedido de raíz por el Fiscal General, Jesús Cardenal, que prohibió taxativamente a la Fiscalía Anticorrupción y a la Fiscalía de Madrid la investigación de aquellos sucesos", sostiene Modesto Nolla, diputado de la Asamblea de Madrid de 1995 a 2011.

"La gran paradoja del 'tamayazo' es que solo hay una persona condenada, un trabajador de telefónica, el que supuestamente filtró el cruce de llamadas entre los protagonistas de la trama", indica Felipe Serrano, periodista autor de 'El tamayazo: crónica de una traición'.

Cuando meses después del 'tamayazo', Zapatero ganó las elecciones muchos socialistas suspiraban por desbloquear la investigación, pero ese momento nunca llegó.

"Cuando accedimos al Gobierno de España ya había pasado un año, no se habían investigado las cosas cuando se tenían que investigar y ya no había opción a descubrir el pastel", lamenta Rafael Simancas.

"Todos esperábamos que se pudiera investigar, pero los retos que teníamos por delante eran mucho más importantes que volver la vista atrás. Pasado el tiempo, lo entiendo", responde Modesto Noya, diputado de la Asamblea de Madrid de 1995 a 2011.

Siete años después del 'tamayazo', Eduardo Tamayo apareció por las puertas de la sede de la Comunidad de Madrid para amenazar a Aguirre con tirar de la manta. Aseguró a los medios que eso no iba a quedar así después de un intento fallido de ver a la presidenta.

"En 2010, Tamayo se presenta sin cita en la Real Casa de Correos de la Comunidad de Madrid, la sede de la Presidencia, y pide una cita con Esperanza Aguirre. Cuando le preguntan quién es y qué quiere, dice que es Eduardo Tamayo", recuerda Alfonso Pérez Medina, responsable de Tribunales de laSexta.

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