Tras el éxito en las elecciones europeas, a Podemos le toca prepararse para empresas más ambiciosas. En una asamblea en otoño decidirán su hoja de ruta. Mientras, un grupo de 25 personas, en palabras de Pablo Iglesias, "se encargará de llevarnos a una asamblea ciudadana 'Sí se puede', así como de coordinar el trabajo".

El propio Pablo Iglesias invita a cualquiera a presentar "una propuesta alternativa que se someterá al aval por parte de la ciudadanía".

El futuro de Podemos queda tan abierto que algunos alertan de que se podría elegir a cualquiera, sin embargo, Iglesias responde que "entre el Pato Donald y Rajoy, me quedo con el Pato Donald".

A pesar de ello, le roba algunas frases, no le consta la posibilidad de poner en marcha una querella conjunta con Izquierda Unida contra el rey. Además, también explica que no ha recibido una llamada del jefe del Estado.

Con quien sí ha hablado Podemos es con los promotores de la cadena humana a favor de la independencia en el País Vasco, sin embargo, según ha dicho Pablo Iglesias, no quiere que se vayan: "Me gustaría que construyeran un futuro con nosotros, pero quién soy yo para decirle a alguien cómo tiene que ser su futuro".

Iglesias está ocupado construyendo el futuro de Podemos, un partido, como él dice, aún sin logística para afrontar los nuevos retos.