La izquierda griega, Syriza, tiene nuevo líder tras la destitución de Alexis Tsipras. Se trata del ex banquero, empresario y neoliberal Stefanos Kasselakis, que ha sido elegido este domingo por las bases de su partido. Se ha impuesto a su rival, la exministra de Trabajo y favorita en las encuestas, Efi Ajtsioglu, con el 56,69%% de los votos. Ha sido todo una sorpresa porque nadie en su propio partido se esperaba que fuera a ganar.

¿Qué se sabe del sustituto de Tsipras? Tiene 35 años y aunque nació en Grecia se marchó a Estados Unidos cuando tenía 14 años. De hecho, hasta hace unos meses vivía en Miami. Solo lleva un mes afiliado al partido, no es diputado y en agosto se presentaba con un vídeo en el que contaba que estudió Económicas en la Universidad de Pensilvania y trabajó durante cinco años en Goldman Sachs, el banco responsable de ayudar a Grecia a manipular sus cuentas públicas a principios de los 2000. Algo que no ha llevado muy bien el ala más a la izquierda de la propia Syriza. Kasselakis explica que precisamente por haber trabajado en un gran banco, está legitimado para defender las política de izquierdas. También ha sido criticado por ser empresario, dado que dejó el banco para montar una naviera. Él dice que no entiende la crítica. Se define como hombre de negocios e insiste en que quien piense que los negocios son para gente de derechas se equivoca.

Las redes sociales son su gran arma. Por ahí se ha ganado a los militantes más jóvenes del partido. En otro vídeo presentó a su marido, un enfermero americano y se convirtió en el primer político en decir que es homosexual en Grecia, un país que va a la cola de Europa en derechos LGTBI. Pero hay otro detalle más que ha descolocado la izquierda griega tradicional. Y es que el nuevo líder de la izquierda griega trabajó como voluntario en el equipo de Joe Biden para las presidenciales de 2008. Y ha llegado a decir que la izquierda griega tiene que tender a la fórmula demócrata estadounidense. De su programa electoral se sabe poco. Aunque ha insistido en convertir a Grecia en un estado laico, (porque sigue siendo confesional) y en eliminar el servicio militar obligatorio. Cosas que le convierten en un líder poco habitual para la izquierda griega.