El libro Guinnes de los récords la ha liado en el mundo del alpinismo. El italiano Reinhold Messner, tenía el récord de ser el primer hombre en haber alcanzado la cumbre de los 14 ochomiles, de las 14 montañas del planeta que superan los 8.000 metros de altura. Pero se lo han quitado y se lo han dado al estadounidense Edmund Viesturs. Él es ahora, para el Guinnes, el hombre que logró esa hazaña. Pero, ¿por qué le han quitado ese récord a Messner?

Según ha publicado el famoso archivo de récords, Messner nunca alcanzó la cima del Annapurna en 1985 y, por lo tanto, no ha sido el primero en escalar los 14 ochomiles sin utilizar oxígeno artificial. Sin embargo, hasta hace un par de años se creía que sí, pero la imposición de un nuevo equipo que certifica datos con la tecnología más avanzadas han dicho que no. Y que ni él ni otros alpinistas alcanzaron realmente la verdadera cumbre de la cima, les faltaban algunos metros.

En tres montañas se ha visto que muchos escaladores creyeron haber llegado a la cima, pero todavía les quedaba un poco. Estas son: el Annapurna, de 8.091 metros; el Manaslu, de 8.163; y el Dhaulagiri, de 8.167. Y en ellas, según los nuevos 'verificadores' de récords, muchos alpinistas se quedaron un poco lejos. Si hubieran seguido unos metros más, habrían visto que la montaña continuaba. En el caso del Annapurna, siguiendo 65 metros, habrían tenido que ascender cinco metros para coronarla.

¿Se les quita el récord a todos los que no siguieron? Según estos nuevos cálculos, Messner no llegó a la cima del Annapurna y por lo tanto no tiene el récord. Además, los españoles Edurne Pasaban y Juan Oyarzabal también se han visto afectados y tampoco habrían llegado a la cima, según estos nuevos datos. Ellos no pretendían engañar a nadie. Solo creyeron que la montaña acababa ahí. Incluso hay quien sostiene que la montaña realmente acaba ahí, que eso son otros caras, otros caminos, pero no la cima. Y también hay quien sostiene que igual no hay que obsesionarse con un metro más o un metro menos, que ya basta con llegar ahí arriba, y que debería hablarse de zona de la cumbre.