Exigencias pendientes
Sánchez, manos a la obra para calmar a los socios: financiación singular con ERC, lenguas oficiales con Junts y los traspasos a Euskadi con el PNV
Los detalles Aunque el Gobierno dice haber ganado una cuestión de confianza ficticia, ahora toca ponerse manos a la obra. No es casualidad que esta próxima semana el Ejecutivo tenga tres reuniones clave con los socios de Gobierno para abordar las exigencias que pactaron para la investidura y que aún están pendientes.

Resumen IA supervisado
El Gobierno de Sánchez afronta el verano con cierta tranquilidad tras superar el pleno sobre corrupción, aunque el apoyo de sus socios es frágil. Esta semana, el Ejecutivo se enfrenta a tres reuniones clave con sus aliados. El lunes, el presidente de la Generalitat, Salvador Illa, se reunirá con representantes del Gobierno para discutir la financiación singular de Cataluña, un acuerdo aún sin cerrar con ERC. El martes, Sánchez se encontrará con el PNV para avanzar en transferencias pendientes, vitales para los jeltzales. Finalmente, el viernes, el Gobierno buscará el reconocimiento del catalán en la UE, una demanda de Junts, requiriendo el apoyo de los Estados miembros.
* Resumen supervisado por periodistas.
El Gobierno afronta el verano tranquilo tras superar el miércoles el pleno monográfico sobre corrupción. Sánchez ha salido airoso porque pese a ser criticado duramente por sus socios, estos mostraron su apoyo al presidente. Eso sí, el apoyo está cogido con pinzas porque ya han avisado de que no habrá carta blanca.
Por ello, aunque el Gobierno dice haber ganado una cuestión de confianza ficticia, ahora toca ponerse manos a la obra. No es casualidad que esta próxima semana el Ejecutivo tenga tres reuniones clave con algunos de los socios de Gobierno para abordar varias de sus exigencias.
Financiación singular para ERC
El primer reto del Ejecutivo corre de la mano de ERC. Este lunes, el president de la Generalitat, Salvador Illa, se reunirá en Barcelona con el ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, y el secretario de Estado de Hacienda para abordar la financiación singular de Cataluña, un modelo pactado hace prácticamente un año por el PSC y ERC a cambio del 'sí' de los republicanos a la investidura de Salvador Illa.
Se trata de un tema complejo por el que en el Ejecutivo se muestran "prudentes" porque, indican, aún queda todo el fin de semana para negociar. Sin ir más lejos, fuentes de ERC reconocen a laSexta que el acuerdo aún no está cerrado, y que aún "quedan flecos importantes sobre el control y la gestión de la recaudación".
Según señalan, los republicanos discrepan sobre el control que la Agencia Tributaria española tendría sobre la catalana. Es más, su intención es presentar en el Congreso una proposición de ley junto al PSOE para reformar la Ley Orgánica de las Comunidades Autónomas (LOFCA) para que la Agencia Tributaria catalana recaude el IRPF. Por tanto, por ahora, todo está en el aire hasta que se celebre la reunión bilateral del lunes que prevé ser una batalla política dura.
Transferencias para Euskadi de la mano del PNV
El martes, Sánchez tiene una reunión muy importante con el PNV. La primera después de que el partido jeltzale dejara claro en el pleno del miércoles que su "confianza va camino de la UCI" tras los casos de corrupción que afectan al PSOE.
El lehendakari, Imanol Pradales, y el presidente español, Pedro Sánchez, se verán las caras en Moncloa para celebrar una Comisión Bilateral en la que avanzarán en transferencias pendientes que acordaron para la investidura de Sánchez y que son muy importantes para el PNV.
Entre ellas está el traspaso de Seguridad Social, que incluiría las prestaciones de paro y la Inspección de Trabajo. Pradales también reclamará la transferencia de salvamento marítimo, la oficialidad del euskera en la Unión Europea, y la macrorregión atlántica.
Lenguas oficiales en la UE para Junts
El Gobierno aún tiene varios compromisos pendientes con sus socios, como el de impulsar el reconocimiento del catalán en la UE, una exigencia de Junts al Ejecutivo y que Sánchez pretende cumplir el próximo viernes 18 de julio.
Fue el pasado mes de mayo cuando el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, llevó el catalán, el euskera y el gallego a Bruselas para reforzar su alianza con los de Puigdemont. Pero la decisión se pospuso ante las dudas de varios países, quienes pidieron "más tiempo" e "información" a España.
Para presentar esa nueva petición y no llevarse un nuevo revés, el Gobierno tendría aglutinar el apoyo de los demás Estados miembros. Lo tendrá que hacer el viernes 18, donde se someterá a la votación de los 27 para reconocer las lenguas que hablan millones de españoles.