La época del espionaje no acabó con la Guerra Fría. De hecho, recientemente ha sido detenido un espía alemán acusado de transmitir secretos de Estado a Rusia. Según el Código Penal de Alemania, se podría enfrentar a cadena perpetua.

Sin embargo, no es el primer presunto espía de Moscú 'cazado' por Occidente, sino que le preceden otros muchos, tal y como recordamos en el vídeo que ilustra estas líneas, en el que podemos ver el 'modus operandi' de espías rusos en Estados Unidos que entregaban documentación en parques y cafeterías. Repasamos algunas de sus historias:

Anna Chapman: de espía a modelo

Anna Chapman fue detenida junto a otros nueve espías que vivían con identidades falsas, en matrimonios falsos y con hijos que no tenían ni idea de nada. ¿Qué fue de ellos? Todos fueron detenidos, se declararon culpables y fueron llevados a Viena para intercambiarles por otros espías. Ahora viven en Rusia, donde Chapman se dedica a ser modelo y a salir en televisión.

Robert Hanssen: espía por dinero

Robert Hanssen era agente del FBI. Fue detenido por entregar a los rusos todos los agentes dobles estadounidenses a cambio de un millón y medio de dólares. ¿Cómo lo hacía? Cuando tenía información, ponía una tira blanca vertical en una farola y cuando los rusos la recogían, colocaban la tira de forma horizontal. Acabó siendo detenido y condenado a cadena perpetua.

Aldrich Amens: pillado por derrochar

Aldrich Ames trabajaba en la CIA... para los rusos. Le pillaron por gastar desproporcionadamente: se compró un Jaguar y una casa al contado. Dinero que obtuvo a cambio de entregar, por ejemplo, al general Polyakov, un espía doble que ya estaba jubilado, a los rusos. Tenía 66 años y fue ejecutado.

Aunque los ya enumerados son los más actuales, hay otros tres imprescindibles, que recordamos a continuación:

Los cinco de Cambridge

Kim Philby estudiaba en Cambridge y, junto a cuatro compañeros, fue reclutado por los rusos en la universidad para ir escalando en la sociedad y espiando. Él fue un alto cargo del servicio secreto británico y otro de ellos, responsable de la Pinacoteca Inglesa.

'El puente de los espías'

Otro caso sonado es el que inspiró la película 'El puente de los espías', protagonizada por Tom Hanks: interpretaba a Rudolf Abel, que filtró secretos nucleares estadounidenses. Le pillaron y le intercambiaron en el puente que da nombre al film.

El matrimonio Rosenberg

También los Rosenberg fueron detenidos por filtrar secretos nucleares. El hermano de ella fue quien les acusó y fueron los primeros civiles ejecutados por espionaje en Estados Unidos. Años después se ha sabido que posiblemente ella nunca fue una espía.