Existen centenares de aplicaciones destinadas a la búsqueda del amormás allá de Tinder. Equipo de Investigación entrevistó a los creadores de una aplicación en la que no se usan fotografías y se centran en la voz. El reportaje, titulado 'El negocio de las citas' y estrenado en 2017, ha sido emitido nuevamente en laSexta este sábado.
Rodrigo Menéndez, cofundador de MURME, explica que comenzaron a necesitar dinero, entre 50.000 y 80.000 euros, en el momento de empezar a programar la primera versión de la aplicación.
Seguidamente el programa visitó en Barcelona a un 'business angel', un inversor privado que apuesta por jóvenes talentos. Carlos Blanco ha patrocinado más de 90 aplicaciones y ha invertido unos dos millones de euros. "He sido emprendedor antes que inversor y he decidido destinar una parte de los beneficios que he obtenido emprendiendo y creando negocios en ayudar a otros proyectos", relató.
Desveló que ha llegado a invertir en una app de citas pero "no fue bien". "No es un sector fácil; es un mercado donde los gigantes lo tienen más fácil que las 'startups locales'", aseguró, como puede observarse en el vídeo situado sobre estas líneas.
Más Noticias
El encuentro de Jordi Évole con el boxeador que entrevistó Jesús Quintero en la cárcel
Eugeni Alemany, indignado con una mujer que cocina un chuletón en el motor: "Es una entusiasta de la cerdada"
Todo lo ocurrido en el 'caso Negreira': del inicio en el 15 de febrero hasta la imputación del Barça
Josep Pedrerol analiza la última hora del 'caso Negreira': "El culé tiene motivos para estar enfadado"
Ferreras, sobre el 'caso Negreira': "Es una vergüenza lo que ha vivido el fútbol en este país"
*El contenido al que hace referencia esta información corresponde a un programa de Equipo de Investigación de 2017 que laSexta ha vuelto a emitir este sábado.
Equipo de Investigación, en 2022
"He llegado a cobrar 2,5 euros por hora en España": la denuncia de un camarero que ahora gana 2.200 euros en Irlanda
José Miguel decidió irse a vivir a Irlanda para trabajar como camarero, ante las condiciones que había en el sector en España. Ahora, su vida es muy diferente: ha pasado de cobrar unos 750 euros al mes a 2.200, lo que le permite "ahorrar bastante".