Mario Viciosa, periodista de Newtral.es, analiza en El Objetivo las drásticas consecuencias del tabaco para el medioambiente. Y es que las colillas son el primer contaminante plástico de los mares. "El tabaco nos mata, pero las colillas que tiramos por todos lados, afectan a la vegetación, porque las colillas también son plástico", afirma Viciosa.

En un cigarrillo hay miles de compuestos químicos, por lo que, cuando nos lo fumamos, la mayoría de esos componentes terminan en el filtro. Además, estos filtros son no son biodegradables por lo que pueden acabar en el estómago de animales y junto a las raíces de las plantas, originando que a éstas les cueste más crecer.