La Junta de Andalucía dará luz verde al proyecto de ampliación de las zonas de regadío de invernaderos de fresas en el entorno del Parque de Doñana, una medida que podría suponer un gran impacto ecológico para este espacio protegido. La medida ha contado con los votos favorables de PP, Vox y Ciudadanos y la abstención del PSOE.

Para indagar sobre por qué esta medida puede ser tan perjudicial para este Patrimonio de la Humanidad, El Intermedio ha contado con el testimonio de Juan Romero, miembro de Ecologistas en Acción Huelva. Asegura que esta decisión puede provocar el "colapso" porquelos equilibrios ecológicos están ya rotos en Doñana.

Aclara que el soporte vital de esta reserva es el agua y ahora "hay una zona que se parece más un desierto que a un humedal". Además el acuífero "está declarado como sobreexplotado porque se saca más agua que capacidad tiene para recuperarse".

"Estamos haciendo las cosas más y las ocurrencias del Gobierno andaluz es aumentar el regadío, todo lo contrario a lo que necesita Doñana", ha explicado el experto.

Por otro lado, la organización que representa denuncia que esta medida podría responder a intereses políticos y la relacionan con un posible adelanto electoral en Andalucía. Recuerda Romero que "es una promesa que hicieron a los agricultores, que no tenía encaje legal en el entorno de Doñana, y no quieren quedar como personas que prometen y después no cumplen".

Así, aclara que la Junta sabe que no pueden aumentar la superficie del regadío porque no hay más agua, y entonces, dice, "va a dejar la patata caliente al Gobierno central: ellos se lavan las manos y les viene genial como medida electoralista".