La derogación de la reforma laboral era uno de los temas centrales de la campaña electoral de Sánchez y es uno de esos asuntos que quedará en el tintero.

También quedará pendiente la reforma educativa que incluía que la asignatura de religión no cuente para la nota media, que se recupere educación en valores o que se de más peso a la escuela pública frente a la concertada. Tampoco se han podido revertir los recortes en educación que se realizaron durante la crisis.

Entre las leyes sociales paralizadas están la regulación de la eutanasia, las medidas de la ley de violencia de género y el bloqueo de las ayudas a la dependencia. Tampoco se ha avanzado en la derogación del copago farmacéutico que supone un gran perjuicio económico para los pensionistas.