Si algo queda del esplendor Al-Ándalus en nuestro país es que nos ha dejado uno de los edificios más visitados del mundo. Un lugar donde la belleza, la historia y las leyendas se dan la mano para deslumbrarnos. Ese edificio, por supuesto, es la Alhambra y Boris Izaguirre descubre en este vídeo sus rincones nunca antes vistos. ¿Desde cuándo la Alhambra nos ilumina con esta visión esplendorosa?

Marta Sánchez, guía oficial de la Alhambra, explica que lo "primero que se origina, al inicio, es una pequeña fortaleza que los expertos datan incluso antes de tiempos romanos". "Nos vamos al siglo XIII, un momento en el que las taifas de la Península Ibérica se la están comiendo con patatas los castellanos", explica la experta, que detalla que "el rey Fernando III estaba consiguiendo todos los territorios" y "Al-Ándalus estaba a punto de caer". En ese momento, "hay un hombre, el emir de Arjona, de una ciudad, un pueblecito de Jaén, al que llamaban al-Ahmar,

que significa el rojo", porque era pelirrojo.

"Cuando él se muda a la Alhambra, después de ganarse la confianza de Fernando II, decide dejar atrás los palacios que ya existían en el Albaicín y mudarse a la colina de enfrente, donde solo estaba esa pequeña torre", explica Sánchez, que detalla que "él conforma en la zona de la Alcazaba un pequeño palacio junto a unos jardines". Sin embargo, "había construido su palacio demasiado cerca del acantilado y temían que se pudiera llegar a caer".

Eso va a dar lugar después a una tercera fase en la que se empieza a gestar esa ciudad como tal: "Empieza ya a tener pinta de ciudad, porque la Alhambra no era simplemente un palacio con jardines, sino que fue toda una ciudad". Descubre el resto de fases en el vídeo principal de esta noticia. Pero, ¿por qué se sigue conservando tan bien la Alhambra hasta hoy día? "Digamos que es el mayor milagro, el mayor misterio", destaca la experta, que afirma que "acrecienta esa leyenda de que la Alhambra es eterna porque lo cierto es que estos palacios se construyeron para ser terminados de una forma rápida, por tanto, se utilizaron materiales pobres como puede ser la escayola, como puede ser el barro propio de la montaña, o la madera".