"¡Mira, el E.T., illo!", exclama eufórico Jesulín de Ubrique cuando en un descanso en de este particular camino a casa Albert Espinosa le regala este juguete tan especial para él. "¡Esto lo hacía mi padre! ¡Mi padre hacía los E.T.!", le cuenta al presentador. Él mismo ayudaba a Humberto Janeiro a montarlos y ahora se lanza a volver a intentarlo, con no demasiado acierto. "Hijoputa, la cabeza me va a costar la misma vida meterla, illo", exclama desesperado.

Pero aquí no acaba el tiempo de recreo de ambos, que han vuelto a contactar con sus niños interiores. "Te he traído unos cromos y me gustaría jugar a un juego que me enseñaron en el hospital. Un hombre que tenía unos 92 o 93 años creó estas cartas. Me decía 'coge 5 cartas'. Las barajo", le va explicando a Jesús Janeiro.

"Él me decía, 'tú has nacido con una personalidad, la que sea, representada por estas 5 cartas' y se supone que esto es lo que nos ha tocado en la vida y lo podemos cambiar, como en la vida", narra. A Jesulín le ha tocado "ser el número 2", "buen negociante", "belleza", "dinero" y "listo".

"Tímido", "pasional", "ser seguro", "ser inseguro" y "aventurero" son las palabras que según este juego definen a Albert Espinosa. Desde este momento, 'Jesuli' y 'Espi' comienzan a intercambiarse sus cromos. "No, no te doy buen negociante", le advierte el extorero. Dos nuevas cartas llegan al poder de Jesuli. "Hogareño" y "gracioso". También aparecen "salud" y "suerte".

"Te doy la suerte para ti, pero quiero la salud", pide Jesús Janeiro. "Es que la salud la queremos todos", comenta Espinosa.