Después de que María Florencia sea muy exigente con sus rivales al visitar sus locales, ahora es el turno de que Juan Pedro Medina, de Villanos Bistró Canalla; Ramón Barberi, de Burlesque y Luis Callealta, de Ciclo, visiten su restaurante, Puerto Mío. Nada más llegar, los hoteleros afirman que es un local "un poco frío y dejado" que "no incita a entrar".

Por ejemplo, los hosteleros alucinan al ver el cartel del restaurante, ya que en vez de su nombre, lo que aparece es un cartel flamenco en el que no aparece por ningún lado el nombre 'Puerto Mío'. "Lo que pasa es que esto fue un tablado flamenco, cuando tengamos más presupuesto habrá un cartel que diga 'Puerto Mío'", explica María Florencia. Sin embargo, las decepciones de sus rivales no terminan ahí, y es que al pasar a la terraza, siguen viendo un local "frío" por "falta de inversión".

Al entrar al salón, la cosa mejora un poco y destacan que "es acogedor". Sin embargo, poco les dura los piropos al ver que "falta pintura en algunos sitios". "Un cubo de pintura cuesta 50 euros", destaca Juan Pedro Medina, de Villanos Bistró Canalla, mientras que Ramón Barberi, de Burlesque, afirma que "más que falta de presupuesto es falta de cariño a tu negocio". "Yo me esperaba más de ella", reconoce Juan Pedro.