La Generalitat Valenciana estaba al servicio de la trama Gürtel. Es lo que dice el auto del juez Ceres que termina la instrucción de una de las piezas de la trama con casi 30 procesados. De ellos, 21 son excargos del Gobierno de Francisco Camps.

Hay tres exconsejeros y 18 excargos, entre ellos David Serra que sigue siendo diputado autonómico. Todos ellos aparecen vinculados a la adjudicación de contratos a Gürtel, y la lista de delitos que se les imputa no es corta.

Las funciones de estos cargos eran "permitir o decidir actuaciones, con presunta plena conciencia y voluntad, certificando el multifraccionamiento de contratos". Hay hasta siete consejerías involucradas. De ellas, salieron contratos de más de siete millones de euros directos a Orange Market. Todo dirigido por Francisco Correa, Pablo Crespo y Álvaro Pérez 'El Bigotes'.

Funcionaban con un modus operandi muy bien diseñado para evitar cualquier mecanismo de control. Empezaban los trabajos antes, los pliegos de las adjudicaciones se hacían después y muchos  se hacían a través de una caja fija. Todo para beneficiar a las empresas de Gürtel y con el apoyo de una veintena de cargos de la Generalitat.