La delegada del Gobierno contra la violencia de género, Victoria Rosell, ha rechazado este lunes las acusaciones de la exempleada del hogar que ha denunciado pagos en negro: "Esto es absolutamente falso".
En una entrevista en 'Al Rojo Vivo', Rosell ha defendido que la exempleada "desde el primer día" ha tenido contrato y alta en la seguridad social y que así se puede comprobar en los documentos.
"Esto no es una demanda laboral, es un chantaje", ha denunciado la magistrada, que ha asegurado que saben que detrás de ello está un abogado y "una gente ya muy localizada": "Vivimos en Las Palmas y es un sitio relativamente chico", ha explicado.
Rosell ha denunciado que recibieron unas amenazas previas del que fuera jefe del prensa del ministro José Manuel Soria, "que está acusado de acoso hacia mí en un juzgado y que pese a ello me amenazaba con lo de Simona antes de que lo publicaran en 'El Mundo'".
Igualmente ha destacado que ella no es la empleadora: "El empleador es mi pareja, yo por lo tanto no la he despedido, de hecho nadie la ha despedido, ha sido un desistimiento".
También ha destacado que estuvo contratada durante el estado de alarma. "En este país por primera vez hubo un subsidio para las empleadas de hogar con suspensión de contrato y ni si quiera suspendimos el contrato porque el subsidio no era inmediato y era del 70%", ha subrayado.
"Estuvo cobrando el 100% sin venir a trabajar, pese a que era su obligación, porque nos pareció lo más adecuado para la salud de ella, de su familia y de la nuestra", ha insistido al tiempo que ha apuntado que sabía que estaban buscando a otra persona y ha lamentado que "desgraciadamente hay gente que la está utilizando, no para un demanda laboral, sino para un chantaje".
10.000 euros por dar de comer a un conejo
Acabamos de ver en la demanda que han desaparecido los 10.000 euros que nos pidió por dar de comer en vacaciones a un inexistente conejo, en mi casa no hay ningún conejo, desde que 2015 esta señora firmó ese contrato con mi marido.
La mujer le reclamaba, entre otros conceptos, 10.000 euros por supuestamente obligarla a ir a dar de comer a un conejo, una cantidad que ahora ha sido eliminada. "Han desaparecido estos 10.000 euros, cuando no pagamos sacaron la noticia, sabíamos que si pagábamos no iba a salir. Y en medio hay gente de prensa de ultraderecha", ha acusado Rosell.
"La justicia no se puede utilizar para esto, y los medios tampoco, porque los medios eran parte esencial de esta extorsión", ha afirmado la magistrada que ha recordado que la extorsión está prevista en el código penal , al igual que la estafa procesal y las amenazas condicionales.
"Espero que a nadie le pase esto", ha manifestado Rosell que ha defendido que su actitud con la exempleada fue "enormemente generosa" y que gracias al contrato que firmó ahora tiene DNI español y que le ayudó a conseguir la abogada para la tramitación de la nacionalidad, así como con otros problemas.
"Si no soy la empleadora, ni la he despedido, ni le debo un euro, ni jamás le he contratado en negro, ¿qué pinto yo en esa demanda?" se ha preguntado la magistrada, que se ha contestado señalando que la respuesta está en que es una extorsión. "Así lo vio la policía y está judicializado", ha zanjado.