"Lo que duele es la panoja, que es lo que mueve todo y lo que marca los avances", expresa Antonio Maestre en torno a la diferencia que hay entre el sueldo mínimo que estipula el convenio masculino de fútbol y el que recoge el femenino.

"Yolanda Díaz hizo un comentario muy adecuado. No se puede comprender que el salario mínimo en el convenio masculino sea de 180.000 euros y en el femenino de 16.000 euros", añade Maestre.

Para él, es comprensible que cada uno pague de máximo lo que considere, pero no opina lo mismo en torno al mínimo. "Que el mínimo tenga una consideración de ese tipo tan pequeño con las mujeres respecto a los hombres, desde el punto vista legal, es difícilmente sostenible", insiste.