Un equipo de fútbol infantil de la ciudad alemana de Colonia no esperaba al invitado sorpresa que apareció de la nada durante su entrenamiento. Se trata de un torbellino de arena que se fue aproximando sin freno al grupo de jóvenes.

Estos, que parecían impactados por el pequeño tornado, casi no se movieron un ápice del lugar donde estaban. Algunos, de hecho, bromearon con acercarse a este fenómeno y atravesarlo, si bien no llegaron a intentarlo.

En ese momento, el 'diablo de polvo', como es también conocida esta clase de torbellinos, había lanzado por los aires una de las porterías del campo.

Sí hubo un adulto que no dudó en probar suerte y cruzó el tornado de una carrera sin sufrir daño alguno. El torbellino acabó desapareciendo tras chocar contra el muro de unos de los edificios cercanos al campo de prácticas.