En Murcia, el comedor infantil de Cruz Roja abre en Navidad.  Se ha visto obligado a hacerlo para suplir a los comedores escolares, cerrados en estas fechas. En Cruz Roja están desbordados.

Fina García, vicepresidenta de Cruz Roja Murcia, cuenta que “son 2.500 niños los que hay y en realidad se está dando a 160”. Los voluntarios se preocupan de que los niños estén bien alimentados y eso los padres lo agradecen: “La verdad es que es un peso que te quitas de encima” afirma una madre.

No solo en Murcia. También Cruz Roja Zaragoza también abre el comedor en estas fechas. Notan que hay niños que en sus casas no comen bien: “Por la situación de cada familia podemos encontrar con niños que sí que comen bien y otros que tienen determinadas carencias” comenta Laura García, voluntaria del comedor.

Por eso en el menú incluyen alimentos menos asequibles como el pescado. La actividad se puede realizar gracias a que los zaragozanos se han volcado este año de forma voluntaria. Otros años la ayuda de la administración era superior. Ahora, un 55% de todos los ingresos provienen directamente de las aportaciones de los ciudadanos.

Reconocen que sin la solidaridad de los ciudadanos no se habría podido realizar esta actividad cada vez más demandada.