La localidad de Cebolla, en Toledo, vuelve a sufrir serias inundaciones este martes debido a las fuertes lluvias y tormentas que mantienen en alerta amarilla a gran parte de la Península. En algunas regiones, incluida Castilla-La Mancha, las lluvias podrían acumular unos 20 litros por metro cuadrado en una hora.

El pueblo está completamente atravesado por un río de agua y barro que baja con intensidad por toda la localidad, que concretamente ha acumulado 10,5 litros por metro cuadrado. Esta es, desgraciadamente, una situación que ocurre de manera habitual cuando llueve con intensidad, puesto que el pueblo está construido en el cauce de un arroyo.

La última gran riada ocurrió en 2018, aunque Carlos, vecino de la localidad, apunta a laSexta que "a priori no parece que los daños materiales y personales ocasionados por la lluvia sean tan graves" como los de hace dos años. "Esta vez no había prácticamente coches aparcados, y la lluvia no ha sido tan fuerte", explica.

La histórica riada de 2018 desató la indignación de los vecinos del pueblo. En solo 15 minutos cayeron 30 litros por metro cuadrado, el arroyo se desbordó y hubo numerosos daños materiales: casas destrozadas, muebles llenos de barro, coches llenos de agua...

Los habitantes, a costumbrados a sufrir grandes riadas, defienden que el problema es que las infraestructuras no están bien hechas. El cauce del arroyo se desborda y cubre el casco urbano. Piden, ya desde 2018, un plan de mejora para disminuir los efectos de las riadas.