El sismólogo volcánico Jesús Ibáñez ha explicado cuáles son los riesgos de una erupción volcánica como la que se está produciendo en la Cumbre Vieja de La Palma, que actualmente fluye de siete bocas diferentes, y que se ha iniciado tras ocho días de seísmos en la zona.

A juicio del experto, el verdadero riesgo no se encuentra en el magma: "La fuente de lava es una conducción dirigida por la gravedad, en los valles, pero en las cumbres hay una emisión de ceniza mucho más fuerte con capacidad de afectar a la población".

Además, ha indicado el sismólogo, los efectos de la ceniza no solo afectan a nivel poblacional, sino al espacio aéreo y la capacidad de acceder a la zona, así como sus efectos contaminantes a larga distancia.

En este sentido, Ibáñez avisa: "Estamos en una situación crítica. No es un volcán amable. No he visto ninguno amable. Son un volumen muy grande de energía que se convierte en fuego, y es algo que se tiene que tener en cuenta".