La implantación de este nuevo sistema de etiquetas, único y armonizado en toda Europa, pretende que los conductores conozcan con qué combustibles pueden llenar su vehículo y lo apliquen al repostar en otros países.

Las etiquetas no estarán sólo en los surtidores y pistolas de llenado de las estaciones de servicio: los nuevos vehículos matriculados a partir del 12 de octubre deberán llevar la etiqueta, que indican los tipos de combustible con que se puede llenar el depósito.

ETIQUETAS PARA LA GASOLINA: tienen forma de círculo dentro del cual figura la letra E, que significa etanol y va acompañada de números que indican el porcentaje máximo de etanol del combustible.

Las etiquetas para la gasolina tienen forma de círculo con la letra E

ETIQUETAS PARA DIÉSEL: muestra un cuadrado con la letra B dentro, que significa biodiésel, acompañada de un número que indica el porcentaje máximo de biodiésel que contiene. También se identifica con un cuadrado con las letras XTL en el interior el diésel sintético.

Las nuevas etiquetas del gasóleo muestra un cuadrado con la letra B dentro

COMBUSTIBLES GASESOSOS: están representados por un rombo con las letras H2 (hidrógeno), CNG (gas natural comprimido), LPG (gas licuado del petróleo) y LNG (gas natural licuado).

Los combustibles gaseosos están representados por un rombo

No obstante, el nuevo etiquetado no sustituye ni modifica la información que se da en la actualidad en las estaciones de servicio.

Correspondencia de los carburantes actuales con el nuevo etiquetado de combustible