El pasado miércoles 29 de diciembre, la Policía Nacional intervino 300.000 test de antígenos de la COVID-19 en la localidad de Fuenlabrada, en Madrid. Las autoridades consiguieron detectar y bloquear la distribución de estos productos que podría tratarse de test de antígenos irregulares por no cumplir las medidas sanitarias establecidas.

La investigación se inició el pasado martes, y en menos de 24 horas, los agentes llevaron a cabo un dispositivo policial con el objetivo de inspeccionar estos productos correspondientes a cuatro empresas ubicadas en cinco naves de un conocido polígono industrial del municipio.

Un millón de test analizados

En total se analizaron alrededor de un millón de test, de los cuales se intervinieron unos 300.000 por deficiencias en los trámites documentales o bien por carecer de autorización para su distribución por lo que no se podrían considerar aptos para su uso.

Dada la gravedad de los hechos, por la repercusión que podría tener en la seguridad y salud de los consumidores, los investigadores lograron en apenas 24 horas localizar dicha mercancía en un conocido polígono industrial del municipio de Fuenlabrada.

Por estos hechos se abrió un expediente administrativo sancionador si bien se está pendiente de analizar numerosa documentación por si pudieran haber cometido una acción delictiva.

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