Este lunes se ha ampliado al norte de Tenerife la búsqueda de Jay Slater, el joven británico desaparecido hace una semana. Lo último que se supo de él es que se iba a una casa con dos desconocidos después de una noche de fiesta. Llamó a una amiga para decirle que estaba perdido y desorientado. Mientras sigue su búsqueda, la prensa británica ha desvelado el futuro oscuro del joven.
Ni los perros ni los drones ni los helicópteros lo consiguen; no hay rastro de Jay Slater en siete días de búsqueda. La última vez que se le vio con vida fue bailando con amigos en un festival al sur de isla durante la madrugada del domingo al lunes 17 de junio. Según sus amigos, Jay se marchó de la fiesta sobre las 7.00 horas de la mañana, pero no lo hizo solo.
Sus amigos aseguran que se fue al apartamento de dos hombres ingleses, de unos 40 años, a los que dicen, había conocido esa misma noche. Estos estarían a más de 45 km del festival. En torno a las 8:30 de la mañana, su amiga Lucy recibió una llamada de Jay en la que le contó que perdió el autobús y que volverá caminando. Tan solo le quedaba 1% de batería y, además, Jay le dijo que tenía y estaba desorientado.
A partir de ahí se pierde su rastro y su teléfono se apaga. Justo en esta zona de la isla muy cerca de otro punto donde hay testigos que aseguran haberlo visto poco después, pero no se sabe si solo o acompañado. "Solo pido que le alguien le haya ayudado a salir de la montaña", cuenta el padre
Pero el pasado de Jay hace saltar la alarmas. Según medios británicos, tiene antecedentes penales por dar una brutal paliza a otro joven cuando tenían 16 años. Y sus amigos y familiares se preguntan si alguien fue a por él aprovechando sus días en la isla.
El operativo de búsqueda se amplía: ahora se centra también en los alrededores ese apartamento donde, supuestamente, terminó la fiesta con los dos desconocidos, que le vieron con vida por última vez.