La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha anunciado la creación de un fondo para que una persona vacunada contra el COVID-19 -en un grupo de 92 países entre los más pobres del planeta-, y que haya sufrido efectos secundarios graves, pueda ser compensada por ello.
El programa cubre a las personas que hayan recibido una vacuna de la plataforma COVAX, creada por la OMS y otras entidades para garantizar un acceso equitativo a estos tratamientos en los países de ingresos medios y bajos.
Todas las vacunas distribuidas como parte de este plan han pasado todas las etapas propias al desarrollo de una vacuna y que garantizan su eficacia, seguridad y calidad.
Sin embargo, “todos los medicamentos, incluso vacunas que han sido aprobadas para su uso general, pueden en casos raros causar reacciones adversas graves”, ha aclarado la OMS mediante un comunicado.
Más de 190 países participan en COVAX y de ellos los 92 de menores ingresos han sido seleccionados para recibir vacunas financiadas por la plataforma. El programa de compensación anunciado se aplica únicamente a ellos.
“Se trata del primer y único mecanismo de compensación por daños causados por vacunas que opera a escala internacional”, precisó la OMS.
Agregó que el objetivo es ofrecer a ese grupo de países un procedimiento rápido, justo y transparente para recibir compensación en casos de “raros, pero graves efectos adversos, asociados a la distribución de vacunas por COVAX hasta el 30 de junio de 2022”.
De esta manera, los individuos no tendrán la necesidad de recurrir a los tribunales nacionales e iniciar procesos que pueden resultar largos y costosos.
Con cerca de 208 millones de dosis de vacunas administradas en diversos países no se han reportado por el momento secuelas adversas de mucha gravedad.
En casos raros se ha observado una reacción adversa en pacientes con antecedentes de alergias, con 4 a 5 casos por un millón de personas que han recibido la vacuna de la compañía Pfizer y de 2 a 3 casos por millón cuando se trata de la de Moderna, según estadísticas recolectadas en Estados Unidos. Para el programa de compensación, la OMS ha firmado un contrato con la compañía de seguros Chubb Limited.