Una bebé de un año y ocho meses ha muerto ahogada en una piscina privada de un casa ubicada a las afueras de Saldaña, en Palencia. Los hechos se produjeron el pasado domingo, cuando el padre se encontró el cuerpo en la piscina de la vivienda, según ha confirmado la subdelegación del Gobierno.

La Guardia Civil recibió el aviso de que un padre estaba con su hija en el centro de salud, ya que tras un "descuido" la habían encontrado "flotando en la piscina" de su casa, donde en ese momento estaban el padre, un niño de diez años y unas visitas.

Los servicios médicos estuvieron intentando reanimarla durante más de 40 minutos, aunque finalmente nada se pudo hacer por la vida de la niña. Una funeraria de la provincia se encargará de los trámites posteriores. Al parecer, la familia carece del dinero necesario para poder hacerse cargo del funeral de la pequeña y estarían pidiendo dinero para poder afrontar los costes del entierro.