Los seis mossos acusados del homicidio del empresario Juan Andrés Benítez tras ser reducido en el barrio del Raval de Barcelona han aceptado una pena de un año y once meses de cárcel, lo que les libra de ingresar en prisión, gracias a un acuerdo de conformidad que han ratificado ante el juez.

El pacto, alcanzado entre todas las partes justo antes del inicio del juicio, fijado para esta mañana con un jurado popular, prevé que los mossos acusados indemnizarán a la familia de la víctima con 150.000 euros, que no ejercerán como policías durante el periodo de condena y que posteriormente estarán cinco años sin patrullar.

El acuerdo, que los mossos han validado ante el juez en una vista, se ha fraguado tras una negociación a última hora entre todas las partes, después de que el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) haya rechazado esta mañana expulsar de la causa a la acusación popular, ejercida por la Asociación Catalana de Derechos Humanos (ACDH), que hasta ahora era el único escollo para el pacto.

Con esta conformidad se evita el juicio en el que la Fiscalía pedía para seis mossos de la comisaría de Ciutat Vella de Barcelona once años de cárcel por un delito de homicidio y para otros dos agentes una condena de un año y medio por encubrir la actuación de sus compañeros en la muerte de Benítez, ocurrida el 6 de octubre de 2013 en la calle Aurora del barrio del Raval.

En el acuerdo, los seis mossos acusados de la muerte de Benítez aceptan una pena de un año y once meses de cárcel por un delito de homicidio imprudente y otro contra la integridad moral, lo que en la práctica les libra de ingresar en prisión.