El pequeño Bakhtiyer no conoce otra manera de vivir que con su rostro completamente quemado. Un incendio en su casa de Uzbekistán cuando era un bebé hizo que se quemara por completo, con el milagro de que salvó su vida.

El niño ha querido pedir ahora, con cinco años, un conmovedor regalo a Papa Noel para estas navidades: una cara nueva. El pequeño asegura que "sólo quiere ser como otros niños" y que el intenso dolor que sufre a diario cese por fin.

Ahora vive con su familia en Talgar, en el suroeste de Kazajistán, y aunque no puede escribir le dictó a su padre su petición a Papa Noel. El escrito lo ha mandado a una organización caritativa que está llevando a cabo una campaña para estas navidades.

Este es el contenido íntegro de la desgarradora carta:

"¡Hola, Papá Noel! Me quemé cuando era un niño. Perdí la cara en el fuego y desde entonces tengo que esconderme de las personas porque me tienen miedo. Me tengo miedo cuando me miro en el espejo. No tengo nariz, orejas o cabello. Mi mamá dice que no iré a la escuela. A menudo me duele, pero no lloro. Mi madre sí. Papá Noel, dame una cara nueva, por favor, nunca lloraré en mi vida en ese momento. Sólo quiero ser como otros niños".

El pequeño Bakhtiyer procede de una familia muy humilde y no podían costearle su tratamiento. No fue hasta varios años después del accidente cuando una ONG se enteró de su situación y financió su tratamiento. Con cirugía reconstructiva ya han conseguido darle labios, dientes y párpados.

En julio le insertaron implantes en el cuello para crear piel, que será utilizada para reemplazar la piel quemada de su rostro. A finales de este mes de diciembre será operado finalmente.