A la salida del Juzgado de instrucción número dos de Ribeira, en A Coruña, en el que Valeria, la hija menor de Juan Carlos, ha comparecido con motivo de la retirada cautelar de la custodia a la madre, el padre de las dos adolescentes ha dicho que su visita a Galicia ha sido por este asunto y no por el de Diana, caso en el que trata de "confiar en Dios".

"No soy ningún ingenuo. Sé que las expectativas de encontrar a mi hija con vida no son las mejores", ha señalado ante los medios de comunicación congregados en el exterior del edificio judicial.

Juan Carlos, mientras Valeria se resguardó en un coche con su tío paterno, ha contado que acudieron a Ribeira a petición del Juzgado de instrucción número dos, que es el que lleva la custodia, para una exploración física y psiquiátrica de la niña y una declaración suya.

Ha manifestado así, sin entrar en detalles, que Valeria ha de ir recomponiéndose tanto "en lo físico como en lo emocional" y que será un proceso "largo" en el que contará con ayuda de profesionales y en el cual ya ha sido pautado "con quién debe relacionarse y con quién no", sin entrar a especificarlo.

Juan Carlos ha dicho que su hija cuenta con el "calor" de su familia y ha añadido que recibirá "soporte facultativo" para "transitar por este momento tan difícil".