Dos cámaras que funcionaban mal y se encontraban fuera de la celda de prisión donde murió el magnate Jeffrey Epstein, mientras esperaba a su juicio por cargos de tráfico sexual, han sido enviadas a un laboratorio criminal del FBI para ser analizadas, según ha informado una fuente policial.

Los abogados de Epstein, Reid Weingarten y Martin Weinberg, afirmaron este martes al juez de distrito estadounidense Richard Bernam que tenían dudas sobre la conclusión del médico forense de Nueva York, que sostiene que Epstein se suicidó. Las dos cámaras enfocaban la celda de la cárcel en la que Epstein fue hallado muerto el pasado 10 de agosto.

Una fuente ha señalado que dos guardias de la prisión no siguieron un procedimiento durante la noche para hacer controles por separado a todos los prisioneros cada 30 minutos. Además, Epstein había sido retirado de la vigilancia de suicidio antes de su muerte.

Las cámaras han sido enviadas a Quantico, en Virginia, donde se encuentra un importante laboratorio criminal del FBI donde agentes y científicos forenses analizan pruebas.

El diario 'The Washington Post' ha informado de que al menos una cámara en el pasillo de la celda de Epstein tenía imágenes que no servían. El diario señaló que había otras imágenes que sí podían utilizarse que grababan la zona.

La imputación de Epstein

Epstein fue imputado por tráfico sexual de menores y conspiración tras la aparición de nuevos testimonios que le situaban como cabecilla de una "vasta red" de explotación de menores desde sus mansiones en Manhattan y Florida entre 2002 y 2005.

Anteriormente había estado bajo investigación por parte de las autoridades federales y locales por delitos sexuales contra niñas menores de edad, en un caso que provocó la dimisión el mes pasado del secretario de Trabajo de Estados Unidos, Alex Acosta.

Acosta se apartó de su cargo tras darse a conocer que, durante su etapa como fiscal en Florida, alcanzó un acuerdo secreto para reducir una sentencia contra Epstein.

La bancada demócrata en el Congreso, comenzando por la líder de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, reprochó a Acosta su participación "en un acuerdo poco razonable, que impidió que se hiciera justicia para sus jóvenes víctimas".

El acuerdo fue alcanzado en 2008 y permitió a Epstein tras declararse culpable a cambio de una condena de 13 meses de prisión por fomentar la prostitución, que cumplió en forma de trabajos comunitarios desde su oficina.

Acosta mantuvo que, de no haber alcanzado este acuerdo, Epstein muy probablemente habría acabado en libertad.

El caso permaneció enterrado hasta que el 'Miami Herald' publicó en noviembre del año pasado un artículo que detalló el pacto alcanzado entre Epstein y la Fiscalía.

Junto a la aparición de los nuevos testigos, el multimillonario fue finalmente detenido e imputado.