La familia de la menor, víctima de las agresiones sexuales por las que han sido condenados a 38 años de cárcel los tres exjugadores de la Arandinaha denunciado las "amenazas e insultos" que está sufriendo a través de las redes sociales, así como la filtración de datos personales y grabaciones, lo que llevarán ante los tribunales.
La abogada de la familia, Patricia Ortiz, que ejerce la acusación particular en este caso, ha explicado a los medios de comunicación, antes de participar en la Audiencia Provincial de Burgos en la vista que determinará si los condenados entran ya en prisión o no, que la menor se encuentra "encerrada en casa, sin poder salir" y "francamente mal".
La letrada ha considerado que los grupos que defienden a los exjugadores están "criminalizando a la víctima", por lo que ha pedido "respeto a la sentencia" y que se utilicen "los recursos establecidos por la ley" para "protestar" contra la resolución judicial.
Ortiz ha remarcado que en estos casos "el testimonio de la víctima es muy importante", pero ha añadido que los jueces han tenido en cuenta para dictar su resolución "todo lo que allí se ha dicho", en referencia al juicio y los testigos y peritos que han declarado.
Ante las puertas del Palacio de Justicia de Burgos, donde se desarrollará la vista que resolverá sobre el encarcelamiento inmediato o no de los condenados, se están desarrollando dos concentraciones, una de apoyo a la víctima y otra a los condenados.
En el caso del grupo que respalda a la menor, decenas de personas están entonando gritos de "yo si te creo" y "no es no, lo demás es violación", mientras que en el caso de quienes apoyan a los condenados, cerca de un centenar de personas, proclaman expresiones como "el pueblo no la cree" e "inocentes, inocentes", además de portar carteles en los que se puede leer: "contra las falsas denuncias" y el nombre de los tres exjugadores de la Arandina.
En el 20% de los casos
¿Hay errores en las etiquetas de los precios? La OCU advierte de fallos en su muestra en supermercados
¿Por qué es importante? Pese a que la ley obliga a mostrar las etiquetas del precio en supermercados de una manera clara, sigue habiendo establecimientos que no respetan el estándar establecido.