María se toma una gotas de aceite de cannabis para aliviar las náuseas que le dan tras sus sesiones de quimioterapia. “El medicamento que me recetan para las náuseas me sientan muy mal”, nos cuenta María, que para conseguir este líquido, se tiene que desplazar una hora en coche hasta una tienda de fumadores.

Pide que se siga el ejemplo de Cataluña, que permitirá recetar cannabis para aliviar el dolor de los enfermos. Muchos enfermos se ven obligados a optar por la misma solución y acudir a clubes de fumadores.