Casi nueve años llevan los Pilliod luchando contra un cáncer causado fundamentalmente, o así lo considera la Justicia estadounidense, por un producto que usaron en su jardín basado en glifosato.

El glifosato es el herbicida más empleado en todo el mundo. Y este es el tercer veredicto contra Monsanto, la principal productura. Pero, pese a todo, sigue sin advertirse de sus posibles riesgos en el etiquetado.

Por eso, la de hoy es una condena llamada a ser ejemplarizante, la mayor hasta la fecha: casi 2.000 millones para el matrimonio Pilliod más lo que cuesten sus tratamientos el resto de su vida.

"El dinero está muy bien, pero preferiríamos tener salud. Si hubiera estado bien etiquetado... Esto no tendría que haber pasado, para nada. Nuestra intención siempre fue avisar a la gente", asegura el matrimonio

El conglomerado Bayer, actual propietaria de esta marca de herbicidas, anuncia que recurrirá y apunta al historial médico de los demandantes. Mala táctica, avisan expertos, para la químico-farmacéutica alemana: se desploma en bolsa, las protestas ante sus sedes se repiten, y puede que su imagen pública no se recupere nunca.