La asociación ecologista Ipcena han informado de que el obispo ha contratado por 80.000 euros una empresa especializada en retirar nidos de esta ave zancuda, una especie protegida que se ha convertido en uno de los atractivos naturales más importantes de la ciudad. La empresa contratada por el Obispado empezó a retirar los nidos el pasado mes de noviembre, pero las cigüeñas, que viven toda su vida en los mismos nidos, han vuelto a construirlos.
Ipcena ha decidido enviar una carta al Pontífice, en busca de una "bula papal" para las cigüeñas, después de que la que remitieron al obispado y no hayan obtenido respuesta. "Después de la encíclica del papa de hace menos de un año en la que manifiesta la necesidad de preservar la naturaleza como elemento básico de la supervivencia humana, nos parece una barbaridad lo que hace el obispado de Lleida", sostiene el secretario general de Ipcena, Joan Vázquez.
Según denuncian los ecologistas de Ipcena, la intervención del obispo está amparada por informes favorables de responsables de medioambiente y de Cultura de la Generalitat. "Es lamentable -considera Vázquez- que el obispo diga que no tiene dinero para reconstruir el campanario de la iglesia de Rosselló, que se hundió hace unos meses, y se gaste 80.000 euros en pagar a una empresa para sacar a las cigüeñas".
Los ecologistas, que no han querido hacer pública la carta que han remitido al papa, sí han dado a conocer el contenido de la que enviaron al obispo en noviembre, en la que le piden que abandone el proyecto de retirar los nidos porque, además de no cumplir la normativa, "no es ético ni responsable que la Iglesia dé mal ejemplo en la conservación del medio ambiente y de derroche económico ante las necesidades sociales actuales".