Las trabajadoras de envases de una empresa de frutas y verduras de Almería lo describen con dos palabras: "humillación laboral". Dicen que sufren constantes amenazas como la que han grabado. "La persona que vaya al servicio y no selle y yo la vea, se va automáticamente a la calle. Y nos vemos en el juzgado", asegura una supervisora.

Denuncian que trabajan con tanta presión que hay hasta bajas por ansiedad: "Trabajamos con miedo". Aseguran que en una jornada de ocho horas solo pueden ir dos veces al baño, y tres minutos cada vez. "Para llegar al baño y quitarme la bata y lavarme las manos son casi cinco minutos", ha relatado una trabajadora.

El abogado de la empresa ha negado a laSexta Noticias la veracidad de la grabación: ha afirmado que ha sido cortada. En esta línea, ha asegurado que no incumplen ningún derecho laboral; todo, a pesar del audio. "Me da igual la trabajadora que sea. A partir de ahora, quien vaya al baño y yo no vea el control de los minutos que ha echado, se va a casa", se puede escuchar en otra grabación.

Desde el Sindicato Andaluz de Trabajadores han señalado que este caso no es único. Dicen que hay empresas del sector de frutas y verduras que se saltan los derechos. "Hay más empresas en situación de ilegalidad, con incumplimiento de derechos y acoso", ha explicado José García, portavoz del SAT.

De hecho, la situación a la que se enfrentan algunas trabajadoras del sector no queda únicamente en un trato vejatorio. También se quejan de que ellas, como envasadoras, cobran menos que sus compañeros hombres mozos de almacén. Son ejemplo más de la brecha salarial.