Las declaraciones ante el juez de Fernando Blanco y Marga Garau están llenas de contradicciones. Los padres de Nadia no se ponen de acuerdo en qué hospital analizaron el pelo de su hija, un paso un fundamental en el diagnóstico de la enfermedad. Tampoco en quién hizo la extracción: "Envió unas muestras de pelo de Nadia al Dr. Ferrán del Hospital Clínic de Barcelona, que el propio declarante extrajo de las muestras de cabello" decía el padre.
La madre, en cambio, asegura que se hizo en el hospital de Mallorca: "La extracción de pelo la hizo Son Llaçer, no la hizo ni ella ni su marido". Sobre la medicación que tomaba la pequeña, otra contradicción. Fernando asegura que la medicación homeopática que toma su hija, es cara pero Marga afirma que a su hija no se le da medicinas especiales.
En la propia declaración de Fernando encontramos más contradicciones consigo mismo. Responde que acudía a servicios paralelos de la medicina convencional porque los médicos "solo nos decían vamos a esperar a ver qué pasa". Pero luego afirma que los médicos le decían que "Nadia estaba envejeciendo muy rápidamente y a lo mejor que en dos años después no la tendría".
Cuando la defensa le pregunta por el nombre del médico de Tolouse al que lleva su hija, responde: "No se acuerda de los nombres de los homeópatas de estos países". Pero en otro punto de su declaración hace referencia al Dr Smith: "Iba cada tres meses a Tolouse, el nombre del médico era el Dr. Smith".
Volvemos a la declaración de Marga, en la que también encontramos contradicciones. La madre declara que Fernando le decía que la llevaba a Houston porque ella "no aprobaba las terapias alternativas". Pero luego asegura que "la niña estaba mejor cuando venía de estos tratamientos alternativos". Son solo algunas de las contradicciones que forman parte de su declaración.